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jueves, 11 de febrero de 2010

CICLAMEN DE PERSIA (CYCLAMEN PERSICUM)



Estas planas florecen a finales de otoño, en invierno y a comienzos de primavera. Podrá encontrar muchas variedades de la misma, en una gama de colores que va desde el blanco, pasando por el rojo hasta el morado. Aunque suelen ser consideradas plantas anuales, si los tubérculos están secos a finales de la primavera y reposan durante los meses de verano, pueden durar muchos años, aunque no combinen bien con otras plantas. Son ideales para despliegues coloristas en los halls de entrada o habitaciones clásicas dónde no haga excesivo calor.
Necesita un ambiente fresco y luz solar filtrada. Se debe regar con un fertilizante líquido corriente cada dos semanas cuando hayan florecido. Para su cultivo no es necesario transplantar el primer año. Posteriormente transplantar sobre un sustrato a base de mantillo, turba y arena en septiembre. Plantar siempre en la misma maceta. No vierta agua directamente sobre el tubérculo; en vez de ello, coloque la maceta en agua durante diez minutos, dejándola escurrir a continuación.
Normalmente no superan los 20-25 cm. de altura. Encontrará a la venta plantas con brotes desde septiembre hasta Navidades.

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