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lunes, 12 de marzo de 2012

BEGONIA SEMPERFLORENS (Begonia semperflorens)


De plantas llamadas begonia existen muchas especies, pero la Begonia semperflorens, es con diferencia la más conocida. Brasil es su lugar de origen y fue llevada a Europa en el siglo XIX. Es una planta de interior muy hermosa, de tamaño más bien reducida, con flores todas ellas de una brillante tonalidad blanca, roja o rosa, es una esplendida planta sobre todo para combinarla con otras plantas del mismo tipo, entre varias plantas de hoja.
Esta planta contiene abundantes hojas, todas ellas ovales y redondeadas, tienen los bordes rizados y son de color verde oscuro, a menudo con un matiz rojizo muy llamativo y nervaduras hojas en el envés. Los tallos son carnosos y ramificados.
Las begonias suelen cultivarse como plantas anuales. Se compran en primavera y se desechan cuando las flores se marchitan. Sin embargo, para el que tenga paciencia y con un poco de cuidado, viven y crecen durante años. Las flores pueden ser sencillas o dobles.
La temperatura idónea para el desarrollo de esta planta se sitúa entre los 15 ºC y los 21 ºC y no debe estar por debajo de los 10 ºC, esta planta de interior es ideal para la sala de estar, comedor o la cocina, Evite para esta planta los ambientes cálidos y secos y las noches demasiado frías.
Elija un lugar bastante iluminado. Pero alejado de la acción directa del sol. Sin embargo. Cuatro horas de exposición directa a la luz solar, entre noviembre y marzo, pueden ser beneficiosa para su desarrollo.
Mantenga la tierra húmeda sin llegar a anegar, desde la primavera hasta el otoño. Riéguela por debajo de las hojas, para evitar la proliferación de hongos en las plantas frondosas. Reduzca los riegos en invierno y temporadas húmedas.
Es preciso mantener un alto nivel de humedad para que no se caigan las flores. Ponga el tiesto en una bandeja con guijarros y mantenga la base húmeda.
Abone la planta con fertilizante líquido diluido para plantas de interior, cada dos semanas, durante la temporada fuerte de crecimiento.
En caso de que lo considere necesario, trasplántela en primavera, puede que sea preciso trasplantarla incluso hasta dos o tres veces durante el verano y el otoño, ya que se trata de una planta de crecimiento rápido. Prepare una maceta del tamaño superior y utilice una mezcla de tierra común, turba y arena. Si no quiere trasplantarla, puede podarla, asegurándole así el proceso normal de regeneración.
Puede ser una excelente idea rodear los tiestos de las begonias con turba húmeda, ya que de este modo se, producirá una atmósfera local saturada de humedad, extremadamente beneficiosa para estas plantas de flores brillantes.

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